La Audiencia de Valencia ha archivado las diligencias abiertas contra una letrada por un presunto delito de desobediencia cometido al negarse a dar la identidad de su cliente a un juzgado de Paterna. El tribunal entiende que actuó correctamente, amparada por el secreto profesional, al negarse a comunicar al juzgado la identidad de su cliente, denunciado por llamar a los funcionarios judiciales déspotas, sinvergüenzas y maleducados.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 24 de noviembre de 2001