El juzgado de primera instancia número 1 de Martos (Jaén) ha dictado una sentencia en la que se reconoce el derecho de un inmigrante marroquí, Abbes Ouabbi, de 23 años, que perdió su mano izquierda cuando trabajaba de forma irregular en una finca de olivar, a una pensión de incapacidad total. El accidente ocurrió el pasado 5 de mayo en una finca de Martos. Una máquina trituradora le amputó la mano, lo que le obligó a permanecer ingresado 11 días en el hospital Ciudad de Jaén.
En el momento del accidente, el joven marroquí se encontraba en situación irregular en España y carecía de contrato laboral, a pesar de llevar cuatro meses trabajando en la finca. Ahora, con la sentencia, se reconoce la existencia de relación laboral, lo que le da derecho a recibir una pensión permanente de incapacidad total de 64.793 pesetas al mes, equivalente al 55% de la base reguladora. Además, el joven ha obtenido sus permisos de trabajo y residencia en España.
El caso, según informó ayer CC OO, se encuentra también en la vía penal para determinar la responsabilidad del empresario en el accidente laboral. Ouabbi declaró a los periodistas que su intención, 'a pesar de ser poco el dinero que me ha quedado', es montar algún negocio en Jaén, con el que conseguir los ingresos necesarios para traer a su familia a España.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 24 de noviembre de 2001