El dramaturgo inglés Peter Brook recibió ayer en Valencia el II Premio Mundial de las Artes en reconocimiento al carácter transversal de sus montajes. Y ofreció una propuesta para superar la pesadumbre derivada de acontecimientos como el atentado contra las Torres Gemelas: compartir el dolor, rendirse a la catarsis. 'Si los talibanes prohibieron las cometas es porque simbolizan la máxima libertad, la posibilidad de remontar el vuelo y salvar la caída que nos arrastra a todos', afirmó.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 25 de noviembre de 2001