Alicante viene sufriendo en los últimos meses un incremento de las actitudes racistas. El pasado fin de semana falleció un inmigrante en la plaza de San Cristóbal, junto al barrio. Anoche, pese al frío, más de dos centenares personas se concentraron en ese mismo lugar bajo el lema No a la violencia, no al racismo. A la concentración de condena a las actitudes xenófobas, convocada por varias asociaciones cívicas, no acudió ningún cargo público ni ejecutivo del PSPV ni del PP, que gobierna en la ciudad, sólo algún militante de EU se sumó al acto. Los organizadores repartieron un manifiesto en el que denuncian 'la pasividad de las autoridades' frente a 'estas agresiones racistas, de corte fascista, que atentan contra los derechos de las personas, la convivencia, la tolerancia y el respeto a la pluralidad'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 25 de noviembre de 2001