Las principales ideas que José María Aznar quiere impulsar en el XIV Congreso Nacional del PP, en enero, son del PSOE. O al menos del nuevo pensamiento progresista y de izquierdas que quería patrocinar José Luis Rodríguez Zapatero. Las tres ponencias ideológicas de la convención del PP, El patriotismo constitucional, El Estado en el siglo XXI y La sociedad de pleno empleo, se basarán en postulados defendidos ya por el filósofo socialdemócrata alemán Jürgen Habermas, el demócrata norteamericano Al Gore y el primer ministro laborista inglés Tony Blair. El PP remozará su programa con un giro desde el centro reformista para disputar el espacio electoral con el que los socialistas cuentan para recuperar el poder.
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Las instrucciones de Aznar para el XIV Congreso Nacional del PP, convocado para los días 25, 26 y 27 de enero, tenían incluso un lema: la convención de las ideas. Es decir, dar otro salto más en el camino que inició hace 11 años cuando tomó el mando del partido. Primero lo refundó y renovó, luego lo colocó como alternativa, más tarde se preparó para formar Gobierno y ahora quiere que se identifique al PP con la formación que aporta soluciones, propuestas, planteamientos ante los problemas modernos del nuevo siglo.
Aznar quería que los tres vicesecretarios generales (Mariano Rajoy, Rodrigo Rato y Jaime Mayor Oreja) elaborasen unas comunicaciones que repasasen por un lado los logros de estos seis años de Gobierno y fijasen los grandes criterios de la próxima década.
Las tres ponencias encargadas a nuevos dirigentes ya en el Gobierno o en puestos territoriales de proyección, también tienen la obligación de traspasar en sus contenidos y en sus miras el plazo limitado en los programas de una legislatura. El proyecto de Aznar quiere ser para toda la década aunque él abandone el mando del barco en 2004.
Sobre las bases ideológicas de las ponencias del Congreso lleva trabajando ya desde antes del verano el que será ahora su coordinador, Eugenio Nasarre, secretario ejecutivo de Estudios y Programas del PP. Hace un mes, sobre una lista de 21 candidatos, Aznar y Javier Arenas, el secretario general, resolvieron los nombres de los seis ponentes políticos.
La idea de dedicar una ponencia al Patriotismo constitucional del siglo XXI surgió del jefe de Gabinete de Aznar en La Moncloa, Carlos Aragonés.
Distintos dirigentes políticos españoles, socialistas y populares, se atribuyen el acierto de exportar a España en los primeros años 90 las teorías popularizadas en 1989 por el filósofo socialdemócrata alemán Habermas. Tanto el ex presidente socialista del Senado Juan José Laborda como la actual titular de esa cámara, Esperanza Aguirre, el ministro del PP Juan José Lucas y uno de los padres de la Constitución, el popular Gabriel Cisneros, aseguran que disertaron sobre la importancia de reivindicar los valores cívicos, morales y de libertad de la Constitución de 1978 entre 1992 y 1995.
La resurrección del término
Pero la resurrección del término como una huella de identidad le cabe al equipo del nuevo líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, que incluyó esas referencias en sus primeros discursos. En el PSOE existe gran expectación sobre las aportaciones del PP a ese concepto, porque su temor es que Aznar lo derive hacia una suerte de exaltación de un renovado nacionalismo español. Para Zapatero el patriotismo constitucional tiene mucho que ver con una manera de asumir el Estado de las autonomías y sus diversidades que en nada se parece a los comportamientos de Aznar.
En el PP, sin embargo, admiten la "paternidad" socialista en España de esa idea. Dicen que no les importa. Es más, asumirían con agrado ir a remolque del PSOE en ese concepto "si al final se consagra en la sociedad, en la juventud y en las escuelas la importancia de la Constitución como un eje común, intocable y compartido entre los principales partidos". No ha sido nada casual que los elegidos para desarrollar y presentar esa ponencia sean el ministro de Exteriores, el catalán Josep Piqué, y a la presidenta del PP de Guipúzcoa, María San Gil.
La segunda ponencia ideológica se titula El Estado en el siglo XXI: las nuevas responsabilidades. Sus promotores reconocen que recogieron esa idea del programa del demócrata norteamericano Al Gore en su última campaña frente al republicano y conservador George W. Bush. Dentro de su discurso sobre la "nueva frontera demócrata", Gore planteó una revisión del modelo de Estado, una modernización del Gobierno de la nación, más avanzado, de acuerdo con la descentralización de los servicios y de las responsabilidades hacia las administraciones locales. El PP ya insinuó algo parecido en su programa electoral de 2000 en el capítulo sobre La administración de los nuevos tiempos, pero se quedó muy limitado a la "ventanilla única". Esos ponentes serán Gabriel Elorriaga (secretario de Estado de Ordenación Territorial) y Pilar del Castillo (ministra de Educación).
La tercera ponencia, La sociedad del pleno empleo y oportunidades, profundiza en cuestiones revisadas por la Tercera Vía preconizada por el primer ministro laborista británico Tony Blair, amigo de Aznar. El PP quiere transmitir en ese discurso que el objetivo utópico del pleno empleo, cada vez más cerca, no sólo transforma económicamente la sociedad, al proporcionar más puestos de trabajo y recursos, sino incluso el concepto de familia y el de las nuevas prestaciones sociales del Estado del Bienestar. Sus ponentes serán el alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, José Manuel Soria, y la secretaria de Estado de Presupuestos, Elvira Rodríguez.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 26 de noviembre de 2001