Agentes de la Guardia Civil detuvieron anoche en Pamplona, tras un tiroteo, al etarra Jorge Olaitz Rodríguez, de 23 años, miembro liberado del comando Nafarroa, que iba armado con una pistola. Un segundo terrorista logró darse a la fuga tras robar un coche, a cuya propietaria mantuvo retenida como rehén durante 20 kilómetros. Los dos etarras fueron localizados en un control rutinario en la capital navarra. Jorge Olaitz se encontraba huido desde hace un año. El 24 de noviembre de 2000 fue sorprendido por la policía, junto a Iñaki Beaumont Etxebarria, cuando ambos esperaban la salida de su domicilio del ex concejal de UPN Miguel Ángel Ruiz de Langarica, para matarlo. Beaumont fue capturado, pero Olaitz logró escaparse.
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La operación de la Guardia Civil comenzó en la estación de autobuses de Pamplona, en pleno centro de la ciudad, cuando los dos etarras despertaron las sospechas de los agentes. Los terroristas fueron seguidos hasta que, a unos cuatro kilómetros, junto al número 3 de la calle Doctor Galán, en el barrio de San Jorge, los agentes pidieron a ambos que se identificasen.
En ese momento, uno de los etarras esgrimió un arma y comenzó a disparar. Ambos echaron a correr. A unos 150 metros, junto al río Arga y un campo de fútbol del barrio, los guardias y los terroristas mantuvieron un nuevo tiroteo, tras el que fue detenido Jorge Olaitz Rodríguez. No hubo heridos.
Una treintena de jóvenes se encontraban jugando en el campo de fútbol. Según su testimonio, oyeron ocho o diez disparos y una de las balas, silbando, llegó a cruzar todo el campo. Los testigos vieron a cinco agentes de paisano participar en la captura de Olaitz.
Mientras este terrorista era arrestado, su compañero, pistola en mano, lograba escaparse y robaba un Peugeot 205 blanco, tras encañonar a su propietaria, a la que mantuvo como rehén. La mujer fue puesta en libertad, en perfecto estado, a unos 20 kilómetros de Pamplona, en la localidad de Etxarren, donde el etarra abandonó el vehículo y prosiguió su huida a pie. La Guardia Civil estableció de inmediato un fuerte dispositivo en todo el valle de la Barranca, en busca del huido.
Jorge Olaitz Rodríguez, de 23 años y natural de Pamplona, es miembro liberado del comando Nafarroa. El 24 de noviembre del año pasado fue sorprendido por agentes del Cuerpo Nacional de Policía, junto a Iñaki Beaumont Etxebarria, cuando iban a matar al ex concejal de UPN Miguel Ángel Ruiz de Langarica. Beaumont fue capturado, pero Olaitz escapó.
Los etarras tenían previsto matar a Langarica, casado y con tres hijos, disparándole cuando se subiera a su coche, inmediatamente después de que abandonara su domicilio, situado en la plaza de la Virgen de las Nieves.
El ex concejal, miembro actualmente del Consejo Político de UPN, evitó el atentado gracias a que los agentes de un vehículo policial de la Operación Escudo, para prevención de atentados contra jueces, fiscales y políticos, sospecharon de un individuo que se encontraba, a las 9.10, en la calle de Martín Azpilicueta. Beaumont hizo ademán de sacar su pistola cuando los policías fueron a identificarle, lo que provocó que dos agentes se abalanzaran sobre él, le detuvieran y le llevaran a dependencias de la Brigada de Información en Pamplona.
Beaumont y el ayer capturado Olaitz formaban el comando Amaiur. Este comando se constituyó después de que ambos terroristas, con antecedentes por actos de kale borroka [violencia callejera], se reunieran en Francia con el dirigente de ETA ya detenido Xabier García Gaztelu, Txapote, que les dio instrucciones para cometer atentados mortales. Los presuntos miembros del comando Amaiur recibieron una instrucción somera sobre el uso de las pistolas y posteriormente les fueron entregadas dos armas con munición, informa Vasco Press. Una de estas pistolas, una Sig Sauer, fue intervenida a Beaumont en el momento de su captura.
Los terroristas recibieron entonces instrucciones para buscar información sobre determinados objetivos. La policía, a raíz del arresto de Beaumont, descubrió que los presuntos etarras habían reunido datos sobre cinco concejales y un parlamentario foral, miembros del Partido Socialista de Navarra y de UPN. Tres días después de la detención de Beaumont y de la fuga de Olaitz, los dos tenían que haber sido juzgados en la Audiencia de Pamplona, junto con otras seis personas, por los desórdenes desencadenados durante la procesión de San Saturnino en 1999. Ambos insultaron a ediles de Pamplona llamándoles "carceleros".
Desde el fin del alto el fuego de ETA, en diciembre de 1999, dos personas fueron asesinadas por la banda terrorista en Navarra. Francisco Casanova, subteniente del Ejército, murió tiroteado el 9 de agosto de 2000 en el garaje de su casa, en Berriozar, cerca de Pamplona. La segunda víctima fue el concejal de UPN de Leitza José Javier Múgica, que falleció al estallar la bomba lapa adosada a su coche el 14 de julio de este año.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 27 de noviembre de 2001