El rey Gyanendra declaró ayer el estado de emergencia en Nepal y ordenó al Ejército acabar con la guerrilla maoísta tras el estallido de violencia en el que han muerto desde el pasado sábado más de 280 personas. El Consejo de Estado, bajo la presidencia del primer ministro, Sher Bahadur Deuba, se reunió para pedir al rey la suspensión de varias libertades civiles, entre otras, la de asociación y prensa.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 27 de noviembre de 2001