Estudiantes y profesores coordinan sus protestas contra la LOU por Internet

Como las reformas universitarias precedentes, la que ha soliviantado los ánimos en esta ocasión, la LOU, tiene una denominación igual de esotérica que las anteriores (LAU, LRU). La novedad: estudiantes y profesores coordinan la lucha gracias a Internet.

La Ley Orgánica de Universidades ha puesto de acuerdo por primera vez a profesores, estudiantes y personal administrativo contra una reforma. No fue así con LAU en 1979 y la LRU en 1985.

'El anteproyecto de Ley Orgánica Universitaria ha sido elaborado al margen de la comunidad universitaria', señalan en una página de la Universidad de Valencia firmada por más de 4.200 profesores.

Estudiantes y profesores, muy conectados, están sacando provecho de Internet y muestran a través de ella su oposición a la reforma que actualmente se tramita en el Senado y que fue aprobada en el Congreso el 31 de octubre por el Partido Popular, Convergència i Unió y Coalición Canaria.

Los profesores de Económicas en la Universidad de Santiago consultan la agenda diaria con los actos de protesta contra la reforma. Los estudiantes usan agendas de movilización y otras informaciones útiles (situación en otras universidades, listas de correo). La nueva ley ha provocado las mayores manifestaciones universitarias españolas. A la del 7 de noviembre fueron entre 60.000 y 200.000 personas, según las fuentes. Ahora hay mayor masa universitaria: 1,5 millones de estudiantes, el triple que durante las protestas contra la LRU, hace 25 años. Y ahora cuentan con la red para coordinarse: 'Ayer en el comité general de huelga de Sevilla... se habló de un paro académico simbólico para la semana que viene'. 'Se ruega denle la mayor difusión posible, es una medida de impacto nacional', dice una lista de correo anti LOU.

La ministra de Educación ha insistido sobre la desinformación de los estudiantes. Sin embargo, las páginas web de las asociaciones estudiantiles y los movimientos opuestos a la LOU están perfectamente informadas. En todas aparece el texto del proyecto de ley y las razones de su oposición a la reforma: el intento de 'privatización encubierta' al permitir que pueda contratar a un 49% de profesores en régimen no funcionarial, 'porque es antidemocrática' debido a la reforma de los órganos de Gobierno, la creación de una élite universitaria al introducir una Agencia Nacional de Evaluación, según figura en una página. Y sobre todo por ser una 'ley para la universidad sin la universidad', argumento repetido hasta la saciedad en Internet. Aún está por ver si las próximas movilizaciones surtirán efecto sobre la ministra Pilar del Castillo. La próxima será en Madrid, el 1 de diciembre.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 29 de noviembre de 2001