Una veintena de representantes sindicales de los hospitales de la Red Hospitalaria de Utilización Pública (RHUP) se encerraron ayer al mediodía en la sede del Departamento de Sanidad y exigieron que el consejero, Eduard Rius, "dé la cara" y se comprometa a escuchar sus reivindicaciones.
Cuatro días de huelga en los hospitales concertados durante este mes de noviembre no sirvieron para que sindicatos y patronales acercaran posiciones, el pasado martes, en la negociación del convenio. Los sindicatos consideran que la propuesta que llevaron las patronales a la reunión "era indignante y regresiva", y dieron por rotas las negociaciones. Los 15.000 trabajadores de los hospitales concertados exigen la equiparación de sus condiciones laborales y salariales con las del personal de los hospitales públicos, dependientes del Servicio Catalán de la Salud.
Para conseguir este objetivo, los sindicatos están dispuestos a llevar sus protestas "hasta las úlitmas consecuencias", advirtió ayer Juan Cobacho, miembro de UGT en la mesa negociadora.
Los delegados sindicales que ayer se encerraron en la sede de Sanidad, representantes de CC OO, UGT, AMIC y IAC en la mesa de negociación del convenio, se dirigieron a las doce del mediodía hasta el vestíbulo del despacho de Eduard Rius y amenazaron con no abandonar el lugar hasta que fueran recibidos por el consejero, que ayer se encontraba en el Parlament, donde se debatían los presupuestos para 2001, por lo que miembros del departamento pospusieron la entrevista hasta esta mañana.
Los delegados sindicales rechazaron entrevistarse con el secretario general del Departamento de Sanidad, Ramon Masseguer. A la acción de los representantes sindicales en el Departamento de Sanidad se sumó el encierro, desde anoche hasta esta mañana, de grupos de trabajadores en varios hospitales comarcales, entre ellos el Municipal de Badalona y el del Espíritu Santo de Santa Coloma de Gramenet.
Finalmente el consejero de Sanidad Eduard Rius accedió a reunirse con los encerrados a condición de que desalojaran la sede del departamento. Rius adquirió diversos compromisos que los representantes sindicales consideraron suficientes para terminar el encierro, pero no así los que también tienen lugar en los distintos centros hospitalarios. Entre estos compromisos, según fuentes sindicales, Rius aceptó tutelar la negociación, convocar con urgencia a los patrones y presentar una nueva oferta en la línea de una mayor homogeneización.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 30 de noviembre de 2001