El Teatro Lara de Madrid se convirtió ayer en una improvisada selva en la que 30 concursantes se dieron cita para competir por dar el grito más fuerte y más largo al estilo de Tarzán. La prueba estaba organizada por una marca de consolas de videojuegos. Un centenar de espectadores aguantó como pudo la hora y media de gritos de los aspirantes a Tarzán.
Iván García, con 111 decibelios de potencia, y Daniel Torres, con 26 segundos de duración a plena potencia pulmonar, se alzaron con el triunfo de la competición. Entre los participantes había cuatro mujeres cuyos gritos, según la organización, fueron 'más tímidos' que los de sus compañeros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 2 de diciembre de 2001