El presidente del Gobierno y del Partido Popular (PP), José María Aznar, se ha despachado en su ya casi habitual estilo prepotente e irrespetuoso, en este caso contra las manifestaciones habidas hasta la fecha contra la Ley Orgánica de Universidades (LOU), y más en concreto sobre lo que ha denominado 'lío' de miles de personas el pasado día 1 de diciembre en Madrid. El estilo, las risitas, las formas en definitiva le descalifican sin más como presunto estadista -si es que muchos más, aparte de él mismo, creen que lo es-, y en cuanto al contenido de las mismas además de injustas e innecesarias, constituyen una total falta de respeto a principios constitucionales como el derecho de manifestación. Lamentable.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 8 de diciembre de 2001