La estatua de Pablo Iglesias, semidestruida por los falangistas en 1936, enterrada por un militante socialista en el parque del Retiro y recuperada 38 años después gracias a un plano que éste realizó del lugar exacto, volvió ayer a las calles de Madrid, entre Reina Victoria y Pablo Iglesias. En realidad, se trata de una copia, ya que el original, con la nariz rota, está en la sede del PSOE.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 10 de diciembre de 2001