Las ONG de apoyo a inmigrantes y los sindicatos UGT, CC OO y USO llevan tres meses esperando que el delegado del Gobierno, Francisco Javier Ansuátegui, les reciba para 'pedirle soluciones a la insostenible situación de miles de extranjeros por el grave retraso en la tramitación de sus expedientes de residencia'. EL PAÍS intentó ayer, sin éxito, obtener explicaciones de la Delegación del Gobierno.
Todas estas entidades, entre las que se encuentran SOS Racismo, Atime, ARI-Perú, Aculco y MPDL, colaboraron con el Gobierno en el proceso de regularización de inmigrantes de este verano. Pero desde que éste acabó, en julio, no han vuelto a reunirse con Ansuátegui. Estaba previsto un encuentro en septiembre, que se aplazó sin que se haya fijado una nueva fecha. Hace un mes volvieron a escribirle solicitando otra cita y, al no recibir tampoco contestación, han vuelto a intentarlo.
Su insistencia se debe a que consideran 'muy grave' la situación creada por la lentitud institucional. Aseguran que hay inmigrantes que deben esperar más de un año desde que reciben la carta del Ministerio de Trabajo que les permite desempeñar un empleo en España hasta que Interior les da la tarjeta plastificada que acredita su estancia legal. Esta situación afecta a trabajadores extranjeros que se presentaron a la regularización de 2000 y a otros que han pedido el permiso desde esa fecha.
Según estas entidades las demoras en la concesión de las tarjetas plastificadas 'están causando gran perjuicio a los trabajadores extranjeros'. 'Muchos han perdido empleos porque después de un año, como aún no tienen el permiso plastificado, sus patrones no se fían de que valga la autorización laboral que les dieron en su momento', aseguran. También destacan que cuanto más tarde logren la tarjeta plastificada inicial, más tarde obtienen también el permiso renovado que les autoriza a traerse con ellos a su familia y a viajar fuera de España, para, por ejemplo, regresar a su país de visita.
'En las comisarías de Los Madrazo y General Pardiñas están dando citas para abril de 2002 a inmigrantes presentados a la regularización de 2000', afirman.
Los permisos para inmigrantes los conceden dos ministerios (el de Trabajo y Asuntos Sociales y el de Interior). El primero decide si autoriza la actividad laboral. Si lo hace, el interesado puede empezar a trabajar y a cotizar a la Seguridad Social. Interior es quien da la residencia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 13 de diciembre de 2001