Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra
OPINIÓN DEL LECTOR

Comportamiento infantil

Torrejón de Ardoz

El Hospitalet está sufriendo las consecuencias de enfrentarse a un grande, a un trofeo que parece amañado y a las quejas de unos jugadores que parecen de cristal.

El campo del Hospitalet es de césped artificial. Y por lo que se sabe, ninguno de sus jugadores sufre malformaciones en el cuerpo, ni han dejado de comer, ni están discapacitados. Ni mucho menos. Ellos no tienen presupuesto para mantener un campo de hierba y se conforman y juegan con lo que pueden. ¡Olé por ellos!

El Deportivo, en una rabieta infantil, de niños mimados y venidos a más -quisiera recordarles a sus jugadores que sólo han ganado una Liga en sus pocos años de Primera División-, se negaron a jugar en un campo artificial porque se podían lesionar... ¡pobrecitos!

Están intentando reclamar un derecho que no debería ser tal. Si a los octavos de final de la Copa del Rey llega un equipo modesto, se juega en su campo. Y punto. ¿Y si los jugadores del Hospitalet se hubieran negado a jugar en campos de hierba porque se podrían lesionar? Se habrían reído de ellos, les habrían tildado de pobres que no conocen el fútbol de alta competición.

En cambio, pretendían que se bajaran los pantalones y accedieran a jugar lejos de su campo, de su gente, del estadio en el que han conseguido esta proeza. No. Estoy con ellos, su negativa a jugar es totalmente loable, comprensible y justa.

Pero he aquí que nos enfrentamos ahora a la ilustre federación, que 'podría' sancionar al equipo por no presentarse. No creo que se atrevan a hacerlo (mucho creo, la verdad...) porque el Barcelona hizo lo mismo y al año siguiente estaba jugando la misma competición. ¿Qué rasero tienen para aplicar la ley? ¿Dónde queda el sentido común?

Deseo recordar una cosa a todos los futbolistas: cuando eran niños que jugaban al fútbol, lo hacían a las ocho de la mañana en invierno, en campos de tierra, encharcados, siempre con heridas, con tierra por todo el cuerpo, campos en desnivel... ¿Eso no era contraproducente para la salud?-

* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 18 de diciembre de 2001