Un comando integrado por cien hombres armados tomó ayer, durante unas horas, la isla de Moheli, la menor del archipiélago de las Comores, en el Índico, tras intentar hacerse pasar por parte de la fuerza especial estadounidense que combate a Osama Bin Laden y acusar al actual jefe de este Estado africano, el coronel Azali Assumani, de colaborar con el presunto terrorista saudí. Al menos siete personas, dos civiles y cinco asaltantes de raza blanca, murieron en los enfrentamientos que siguieron entre soldados del Ejército y el falso comando.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 20 de diciembre de 2001