La Comisión Europea aprobó con condiciones la adquisición de la petrolera y petroquímica alemana DEA, del grupo RWE, por parte de la británico-holandesa Royal Dutch/Shell, así como la concentración de los negocios en el sector petroquímico de la británica BP y la alemana Veba, filial del grupo E.ON.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 21 de diciembre de 2001