El sindicato UGT estima que cerca de 10.000 personas en Cataluña no podrán beneficiarse el año que viene de los planes de empleo, dirigidos a los colectivos que tienen más dificultades para insertarse al mercado laboral, como es el caso de los parados de larga duración, mujeres, inmigrantes, disminuidos y mayores de 45 años y que no reciben ningún tipo de prestación social. Éste es uno de los 'efectos colaterales' de la reforma laboral y de la 'hipócrita' ley del déficit cero, según afirmó ayer el secretario de Política Institucional de UGT de Cataluña, Ciriaco Higalgo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 22 de diciembre de 2001