La Casa Blanca presionará al primer ministro israelí, Ariel Sharon, 'para que cree una mejor atmósfera' que permita la vuelta a la mesa de negociaciones con los palestinos. El presidente George W. Bush se ha comprometido, en una carta personal enviada ayer a Yasir Arafat, a efectuar esta gestión, según anunció Nabil Abu Rudeinma, consejero principal de la presidencia palestina.
El mensaje supone la primera reacción positiva de carácter oficial de la Casa Blanca al anuncio de Hamás de aceptar el alto el fuego decretado por Arafat y suspender hasta nueva orden los atentados terroristas y los disparos con mortero contra el Estado de Israel.
Bush insta además a Arafat a tomar 'conciencia de los desafíos que debe afrontar la Autoridad Palestina' para poner fin a la violencia y hacer posible el retorno al diálogo, al tiempo que reconoce el derecho del pueblo palestino a tener su propio Estado.
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Por último, la carta anuncia el retorno a la región, en fecha aún no concretada, del emisario Anthony Zinni, quien fue llamado la pasada semana a consultas en Washington.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 23 de diciembre de 2001