Una veintena de acróbatas, malabaristas y bailarines convierten estos días el escenario del Palacio Euskalduna en una pista de circo. La compañía polaca Ocelot presenta desde ayer y hasta el domingo su espectáculo El espíritu del arte, dirigido por el ex campeón de gimnasia Bogdan Zajac. La compañía, en un alarde de musculatura y lucha contra la gravedad, aprovecha en su espectáculo la experiencia adquirida por su director en ocho años de trabajo con el grupo canadiense de Cirque du Soleil
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 27 de diciembre de 2001