La Guardia Civil controla desde ayer el calzado de los viajeros que toman vuelos entre España y Estados Unidos, tal y como exige la Agencia Norteamericana de Aviación (FAA). La medida se ha tomado después de que el pasado sábado un hombre intentase activar, en un vuelo entre París y Miami, unos explosivos ocultos en sus zapatos.
Fuentes de AENA (organismo público que gestiona los aeropuertos nacionales) y de la Guardia Civil explicaron ayer que los controles se efectuarán en las puertas de embarque de los aeropuertos de Madrid y Barcelona. Serán aleatorios y consistirán en examinar los zapatos y someterlos a rayos X.
Esta medida no se aplicará, sin embargo, en los vuelos nacionales, ni en los internacionales que no se dirijan a Estados Unidos. Desde España salen diariamente 12 vuelos a Estados Unidos. Diez parten de Barajas (Madrid) y otros dos desde El Prat (Barcelona).
La FAA aumentó, a partir del 11 de septiembre, las exigencias de seguridad en todos vuelos con destino a Estados Unidos. El pasado 4 de octubre, un inspector de este organismo ordenó, incluso, paralizar durante unas horas la salida de los vuelos de Barajas al considerar que los escáneres utilizados no eran fiables.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 28 de diciembre de 2001