Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra

El jefe de la misión de la ONU en Kosovo renuncia por motivos personales

El jefe de la misión de la ONU para la provincia serbia de Kosovo (Unmik), el ex ministro de Defensa danés Hans Hakkerup, anunció ayer que no renovará su mandato, que concluye pasado mañana: "Tras haber sido durante un año el representante del secretario general de la ONU para Kosovo, he decidido no renovar mi contrato, que expira el 31 de diciembre".

Hakkerup se había fijado cuatro prioridades: establecer una autonomía sustancial en Kosovo, incluida la organización de elecciones; apertura del diálogo con las autoridades yugoslavas; refuerzo del ámbito legislativo, y reactivación de la economía. Al realizar un balance de su año de actividad, Hakkerup destacó la adopción, la pasada primavera, de una Constitución que ofrece un marco para la autonomía de la provincia serbia y la celebración, el pasado 17 de noviembre, de elecciones legislativas con la participación de la minoría serbia.

Considera Haekkerup que se han logrado progresos gracias a la firma entre la Unmik y Belgrado de un acuerdo "que define los campos de cooperación". Según Haekkerup, "se han creado las condiciones previas para una lucha eficaz contra el terrorismo y el crimen organizado" y se ha puesto en marcha un presupuesto real para el año 2002.

En un comunicado difundido en Pristina, capital de la provincia serbia de Kosovo, Haekkerup explica como motivo para su renuncia a seguir el cargo: "Después de un año intenso en Kosovo, deseo pasar más tiempo con mi familia antes de asumir un nuevo desafío".

Haekkerup, un socialdemócrata que ocupó el puesto de ministro de Defensa en Dinamarca, ha sido la figura central en el acercamiento entre la Administración internacional de Kosovo y las autoridades de Belgrado a lo largo de este año. Llegó al cargo a principios de año para sustituir al francés Bernard Kouchner. El nuevo representante de la ONU consiguió acercarse de forma gradual a las nuevas autoridades democráticas de Belgrado y al presidente Vojislav Kostunica, llegados al poder tras la caída del ex presidente Slodoban Milosevic.

El secretario general de la ONU, Kofi Annan, lamentó ayer la marcha de Haekkerup. En el mismo sentido se pronunciaron portavoces estadounidenses en Washington al subrayar que el representante "ha contribuido de forma significativa a la paz y democracia de Kosovo".

Por otra parte, un militar francés de la fuerza multinacional de la OTAN fue herido ayer en el norte de Kosovo, por la explosión de una granada.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 29 de diciembre de 2001