Estoy de acuerdo con lo que hace pocos días dijo la Iglesia española acerca de la normativa de extranjería. Como ellos creo que es imprescindible 'suavizar' la Ley de Extranjería mediante la aplicación de su reglamento de una forma más humana. Esta ley, que parece pensada para no poder ser cumplida, provoca situaciones de exclusión social indignas en una sociedad como la nuestra.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 29 de diciembre de 2001