Las ventajas y polivalencia de los todoterrenos ligeros, ahora con mecánicas turbodiésel para mejorar la economía en el uso diario. En esta prueba se analizan las virtudes e inconvenientes de tres de los todoterrenos ligeros más modernos y completos que se venden en España: Toyota RAV4, Nissan X-Trail y Land Rover Freelander.
El primero acaba de recibir un moderno 2.0 D4-D turbodiésel de 116 CV que se vende en versiones de tres y cinco puertas. Y unido a una línea atractiva y unos precios correctos (a partir de 26.023 euros o 4.330.000 pesetas) aspira a ser el líder de la categoría.
El Nissan X-Trail cuenta con un 2.2 Di turbodiésel de 114 CV con cambio manual de seis marchas. Pero sólo se ofrece en versión cinco puertas a partir de 24.779 euros o 4.123.000 pesetas (acabado base Comfort).
Por último, el Land Rover Freelander, pionero entre los 4×4 ligeros junto al RAV4. Monta un motor 2.0 Td4 de 112 CV y tiene un precio de 26.041 euros o 4.333.000 pesetas (versión base 3 puertas o Targa).
En esta comparativa se han elegido carrocerías de cinco puertas, más apropiadas para la vida familiar. Y motores turbodiésel de inyección directa, la opción más interesante para reunir buenas prestaciones y consumos comedidos. El último aspecto es clave en este tipo de automoviles, que por peso y volumen de carrocería tienen una eficiencia limitada y una aerodinámica mejorable para aprovechar al máximo el combustible.
Los familiares más completos
Los 4×4 ligeros son los coches más versátiles del mercado. Al contrario que los todoterrenos clásicos, utilizan chasis de turismo y no tienen reductora. Pero a cambio de unas aptitudes 4×4 más limitadas, pesan menos y son más polivalentes. Sirven para el día a día en la ciudad, porque circulan con agilidad y miden lo justo para aparcar sin grandes agobios. Ofrecen el espacio interior y las prestaciones suficientes para los viajes en familia. Y permiten salir fuera del asfalto en fines de semana y vacaciones.
Estos familiares tan completos tenían hasta ahora una gran limitación: sólo contaban con motores de gasolina (salvo el Freelander). Pero desde hace unos meses las gamas se han completado con versiones turbodiésel, una solución que refuerza sus argumentos como coches de familia.
TOYOTA RAVA D4-D 5p
Un todoterreno de imagen moderna y deportiva. Tiene la línea más vanguardista: ángulos redondeados y aletas musculosas. Y un aspecto joven, dinámico y ligero.
NISSAN X-Trail 2.2Di 5p
Combina solidez y dinamismo, aunque con una línea más cuadrada que sus rivales. Pero tiene presencia e incluye detalles de estilo moderno: parrilla, faros y alerón en el techo.
L ROVER Freeland 2.0 Td4
Un pionero muy al día. Línea moderna, el toque de clase y la elegancia inglesa y la imagen de Land Rover. Y un estilo atractivo, sólido y actual.
CONCLUSIÓN
TRES TODOTERRENOS LIGEROS con motores turbodiésel y un ganador por la mínima, el RAV4. El modelo de Toyota tiene el motor más brillante y ofrece las mejores prestaciones para viajar. Además, gasta como mínimo un litro menos y es también algo más barato que las versiones equivalentes de sus rivales. El Nissan X-Trail presenta una línea más clásica, pero tiene el interior más moderno y funcional. Es el más práctico para el uso familiar y el mejor equipado en seguridad: cuatro airbags y ABS. Pero, aunque cuenta con el sistema de tracción 4x4 más completo, la falta de elasticidad del motor limita sus aptitudes fuera del asfalto. El Land Rover Freelander es el más veterano, pero sigue al día. Y es el mejor dotado para la conducción todoterreno, tanto por diseño interior como por solidez y soluciones mecánicas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 28 de diciembre de 2001