La sala de lo contencioso-administrativo de la Audiencia Nacional ha rechazado el recurso de apelación de la Abogacía del Estado contra la anulación por el tribunal de sendas sanciones disciplinarias graves (suspensión de funciones por actuación incompatible) contra dos inspectores de Hacienda de Baleares. 'Ninguna incorrección', 'ninguna clase de irregularidad', 'ninguna conducta culpable', dice el fallo judicial. En julio de 2001 los jueces ya habían desmontado y dejado sin efecto las medidas disciplinarias del ministerio de Hacienda. Ahora, condenan a la Administración al pago de las costas.
En enero de 2001, el jefe de la de Unidad de Inspección (URI), Javier Salvador Milla, y el subinspector fiscal, Sebastián Cañellas Batle, fueron suspendidos de empleo y sueldo, por un período de un año y seis meses y un año, respectivamente, por la dirección general de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria. Ésta consideraba que habían incurrido en 'causas de abstención legalmente señaladas' y de incompatibilidades. La Audiencia Nacional afirma que Salvador no benefició a las empresas relacionadas con la compañía de seguridad de su esposa, VIPSA. La rehabilitación afecta también a Cañellas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 3 de enero de 2002