Teresa Díaz Bada, que ejercía desde 1998 como presidenta del Colectivo de Víctimas del Terrorismo del País Vasco (Covite) decidió a finales del pasado mes de diciembre abandonar el puesto para poder descansar, debido a que se le hace 'muy difícil' compatibilizar esta función con su vida familiar y el trabajo. La nueva junta, formada, entre otras personas, por Cristina Cuesta y Consuelo Ordóñez, ha decidido mantener al colectivo sin una única cabeza visible, de manera que adoptarán todas sus decisiones de manera colegiada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 4 de enero de 2002