Jennifer Jane, la hija del ministro británico de Finanzas, Gordon Brown, murió ayer, diez días después de nacer prematuramente en un hospital británico. 'La niña murió en paz en brazos de sus padres', declaró un comunicado del NHS, la Seguridad Social británica, según la BBC. Jennifer Jane Brown nació con siete semanas de antelación y sufrió una hemorragia cerebral.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 8 de enero de 2002