La acusación particular pide seis años de inhabilitación y una multa de 10.800 euros para dos celadores del Hospital General de Alicante procesados por no socorrer a un hombre que agonizaba a las puertas del centro sanitario el 26 de abril de 2000. El paciente, José Antonio de Juan, de 39 años, falleció tras ingresar en el hospital. En su escrito de calificación, esta parte imputa a los dos funcionarios, J. V. E. y L. E. A., un delito de omisión del deber del socorro. Rogelio Pérez, letrado de la acusación particular, también solicita una indemnización para la familia de víctima y pide que la Consejería de Sanidad sea declarada responsable civil subsidiaria.
El fiscal del caso también ha presentado escrito de acusación contra los dos funcionarios por el mismo delito. No obstante, el representante del ministerio público ha declinado hacer público su escrito de calificación hasta que el juez no dicte el auto de apertura de jucio oral. Lo único que ha transcendido es que el fiscal solicitará una multa para los dos acusados por entender 'que incumplieron su trabajo al no buscar al enfermo cuando fueron alertados de que había un moribundo a las puertas del hospital'.
Los hechos, según la denunciante, Rosa Jiménez, esposa de la víctima, ocurrieron a unos 25 metros del servicio de urgencias. En ese punto su esposo se desplomó a causa de un ataque de asfixia. La mujer dice que pidió ayuda a los celadores, pero que éstos se negaron a salir a buscar al enfermo. En su declaración en la fase de instrucción, los dos acusados han negado esta versión de los hechos de la denunciante y mantienen que sí salieron a buscar al paciente, pero que no encontraron a nadie en las inmediaciones del servicio de urgencias.
La vista oral se celebrará en la Audiencia de Alicante y los hechos, por el delito que se imputa a los acusados, serán juzgados por un tribunal popular.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de enero de 2002