El presidente de la Société Générale, Daniel Bouton, fue procesado anoche junto con dos directores generales del banco por el delito de "blanqueo de dinero agravado", horas después de la detención de los tres. Las acusaciones han sido formalizadas tras una investigación judicial por blanqueo de dinero entre Francia e Israel. Bouton, de 51 años, preside desde 1997 esta entidad, el tercer banco comercial de Francia por fondos propios. Otros seis directivos se encontraban ya procesados en el mismo sumario.
La justicia sospecha que la Société Générale participó en un circuito de blanqueo, al no efectuar controles antes de aceptar cheques presentados al cobro por bancos extranjeros, sobre todo israelíes y libaneses. Parte de esos cheques habrían sido emitidos por sociedades presuntamente dedicadas a encubrir el producto de estafas.
Tras la notificación del procesamiento, el presidente de la Société Générale quedó en libertad, lo que le permitirá continuar con su función profesional. El banco sostiene que ni la entidad ni sus directivos han participado "a sabiendas o de forma intencionada" en ninguna operación de blanqueo. La banca comercial, que está en vilo con este asunto, ha pedido al Banco de Francia que clarifique las obligaciones de los bancos franceses "en tanto que corresponsales de bancos extranjeros".
Bouton tuvo un papel muy activo cuando la Banca Nationale de París (BNP) lanzó una oferta pública de acciones (OPA) sobre Société Générale y Paribas simultáneamente. Tras meses de discusiones y ofertas, Bouton consiguió escapar de las garras de BNP, que se fusionó con Paribas. Para esta pelea, Bouton contó con el fuerte apoyo del Santander Central Hispano, ya que el banco francés es un socio de la entidad española. La entidad presidida por Emilio Botín compró acciones del banco galo para restar fuerza a la BNP. Tras esta operación, las dos entidades acordaron realizar la fusión de cuatro divisiones del negocio, aunque finalmente, sólo se han cerrado acuerdos en banca privada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 15 de enero de 2002