El nuevo equipo directivo de Admira (antigua Telefónica Media) inició ayer con la destitución de Juan Riva su etapa al frente de la filial de medios de comunicación del grupo Telefónica. Riva era el responsable del área de Internet, cuyo lanzamiento estaba previsto como una división autónoma con el nombre de Admira New Media el mes de marzo. El equipo que preside Luis Abril desde el viernes tiene previsto rediseñar los planes dejados por sus antecesores, lo que implicará cambios en los segundos niveles.
Este equipo fue nombrado por César Alierta, presidente de Telefónica, en sustitución del anterior en respuesta a los ataques vertidos por El Mundo sobre un supuesto uso de información privilegiada de un sobrino de Alierta cuando éste se encontraba al frente de Tabacalera. Según esa información, la operación le reportó beneficios de 300 millones de pesetas adquiriendo acciones de la firma que presidía su tío. Ayer El Mundo publicó que fue el propio Alierta el que pidió el crédito de 400 millones al Banco Urquijo que sirvió para comprar las acciones desde la firma Creaciones Baluarte. Alierta, que quiere frenar los intentos externos por tomar el control de su grupo mediático, ha afirmado que no supo que su sobrino había hecho esa operación. Los abogados del presidente de Telefónica estudian emprender acciones legales para defender su honor.
El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, por otra parte, reclamó ayer en Ceuta una "profunda" reflexión acerca del proceso de privatizaciones de empresas públicas y subrayó que se elevará una petición al Congreso para que comparezcan los ex responsables de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para aclarar si hubo manejo de información privilegiada, informa Rocío Abad. Zapatero aseguró que el PP cerró en falso la Comisión sobre Gescartera, en la que el PSOE "hizo muy bien sus deberes".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 15 de enero de 2002