La Junta de Jueces de Instrucción de Sevilla acordó ayer dar un plazo de 45 días a la Junta para que subsane las 'irregularidades y carencias' que desde hace cuatro meses sufre el sistema informático de los juzgados, con paradas casi diarias que bloquean la tramitación de expedientes. La Junta de Jueces acordó 'criticar las deficiencias, irregularidades y carencias' de la aplicación informática de las guardias, que 'se multiplican día tras día' desde su implantación el pasado 21 de septiembre.
Este sistema informático, según las citadas fuentes, 'no ha pasado ni un solo día sin dar algún tipo de problemas' y el martes pasado se colapsó a media mañana y no permitió volver a operar hasta el día siguiente, impidiendo la tramitación de los centenares de asuntos que diariamente entran en el juzgado de guardia.
Coincidiendo con la Junta de Jueces, la directora general de Relaciones con la Administración de Justicia, Rosa Bendala, envió un escrito a los magistrados en los que prometió una renovación de los servidores y ordenadores, cuyos primeros elementos serán cambiados este fin de semana.
La Junta va a proceder además a un 'chequeo de la red de comunicaciones internas, renovación de los ordenadores personales, impresoras y servidores y una nueva acción de formación de los funcionarios'. Bendala prometió 'un especial apoyo técnico hasta eliminar las disfunciones, acudir con mayor rapidez a solucionar las averías e instalar un servidor de apoyo para salir al paso de cualquier incidencia'.
Como consecuencia de las irregularidades, en días pasados dimitió el juez Carlos Lledó, uno de los cuatro integrantes de la comisión del plan de informatización, ayer manifestó su intención de hacerlo Federico Jiménez Ballester y Fernando Martínez, no asistió a la junta por enfermedad. El cuarto miembro de la comisión es el juez decano, Andrés Palacios.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 18 de enero de 2002