Los trabajadores de Mecapeña realizaron ayer una cacerolada en el centro de Bilbao ante las sedes del PNV y el PP para pedir soluciones a la rescisión de sus contratos, tras las 'promesas incumplidas' del Gobierno vasco, PP y PNV de facilitar la concesión de ayudas para prejubilaciones y recolocaciones. La plantilla de la empresa de bienes de equipo en quiebra ha acordado hacer concentraciones diarias. El miércoles lo harán también ante la sede de la Seguridad Social, donde se subastarán los bienes de la firma.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 19 de enero de 2002