Josu Arandia, el joven de 19 años y vecino de Igorre que desapareció el 9 de enero, se presentó el viernes en una clínica de Bilbao en la que se encontraba ingresada su madre, según informó Interior. La familia no proporcionó ningún dato sobre el estado en el que se encuentra ni las razones que le llevaron a desaparecer durante 10 días. Decenas de voluntarios rastrearon durante tres días los montes del valle de Arratia en busca del joven.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 21 de enero de 2002