El policía nacional Pablo S.T., que se inculpó por la muerte a tiros del futbolista Sebastián Gómez Garrido, Sebas, el pasado mes de agosto, abandonó a las cuatro de la tarde ayer la prisión de Castellón tras el auto de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial concediéndole la libertad provisional bajo fianza de 18.000 euros. La Audiencia Provincial ha estimado así de forma favorable la petición del abogado defensor del policía, Daniel Rodrigo, quien aseguró en una vista celebrada la semana pasada para evaluar la posibilidad de conceder la libertad provisional, que su cliente es una persona 'totalmente normal' y 'emocionalmente estable' y que 'no tiene intención de eludir la acción de la Justicia'. Rodrigo también argumentó que Pablo S.T. 'se arrepintió espontáneamente' y que posee un 'brillante' expediente policial, además de haber recibido 'numerosas condecoraciones'.
La positiva visión del perfil del acusado no era compartida por el fiscal y el letrado de la acusación particular, quienes se opusieron a la petición de libertad al entender que existía 'un posible riesgo de fuga'. El fiscal manifestó que al acusado se le puede llega a imputar un delito de asesinato y que la gravedad del suceso obliga a la Audiencia a 'tomar precauciones'.
Incidente en la playa
Los hechos acontecieron la madrugada del pasado 26 de agosto cuando Sebas se encontraba junto a una mujer en una playa de Castellón. Según la versión del acusado, él se encontraba orinando en las inmediaciones cuando el futbolista le increpó llamándole 'mirón'. Inmediatamente después iniciaron una pelea, y el agente desenfundó su revólver y disparó sobre la víctima, que falleció al recibir tres impactos de bala en el tórax y el abdomen. El agente lanzó después el arma al mar y, tras lavarse y cambiarse de ropa, acudió a entregarse en la comisaría de la Policía Nacional de Castellón.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 23 de enero de 2002