El futuro Museo de la Ciudad de Sevilla tendrá dos sedes y funcionará como 'un centro de referencia e interpretación de la ciudad y su entorno', según recoge el Plan Director General de esta institución. La intención del Ayuntamiento, impulsor del proyecto, es que esté inaugurado en junio de 2003, pero antes hay que acondicionar los dos conventos que albergarán el museo: Santa Clara y San Clemente, los dos más antiguos de la ciudad.
La oferta principal del Museo de la Ciudad no serán sus 'espacios expositivos', según su propio plan director, aunque tendrá varias zonas reservadas tanto a muestras permanentes como temporales. Los objetivos de esta institución son 'dar a conocer el pasado, el presente y el futuro' de Sevilla 'para facilitar la comprensión de la ciudad'.
La puesta en marcha del museo se hará en tres fases. La primera, que arranca en los próximos días, adecuará el monasterio de San Clemente y parte del convento de Santa Clara. El de San Clemente funcionó como sede del Pabellón de Sevilla de la Exposición Universal de 1992. Merced a un convenio firmado en 1990, la Comunidad Cisterciense, propietaria del edificio, le cedió determinadas dependencias al Ayuntamiento para la Expo 92 y para otros 25 años, con el objetivo de que tras la muestra universal acogiera actividades culturales.
El monasterio de San Clemente no presenta problemas de conservación, aunque Urbanismo deberá adaptar el edificio a las normativas de seguridad actuales. Si se cumplen los plazos, estas obras terminarán en enero de 2003.
El convento de Santa Clara, por su parte, sí que presenta problemas graves de conservación. Hasta el año pasado estuvo ocupado por monjas, que decidieron trasladarse por el mal estado que presentaba el edificio construido en el siglo XII. En noviembre, el Arzobispado y el Ayuntamiento firmaron un convenio por el que éste último adquiría el inmueble a cambio de invertir 1.000 millones de pesetas en su rehabilitación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 27 de enero de 2002