La compañía aérea Virgin Express ha recurrido el fallo de un juzgado del Prat del Llobregat (Barcelona) que la condenó a indemnizar a un pasajero que no pudo viajar a Roma en abril de 1998 por falta de controladores aéreos, lo que provocó que no pudiera cerrar un negocio de 6.000 euros.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 28 de enero de 2002