El Cross de San Sebastián parecía moribundo. También el atleta tanzano John Yuda, tan exageradamente delgado que parece translúcido. Pero los únicos cadáveres a la vista ayer en la hierba del Hipódromo de Lasarte fueron los de los rivales del ligerísimo tanzano. Todos ellos habían dominado la temporada nacional de cross, desde el ucranio Lebed al keniano Chebii, pasando por el compatriota de éste último, Nyamu. Todos quedaron esparcidos por un recorrido que Yuda sobrevoló para marcar un nuevo récord en el circuito, medio minuto menos que el anterior registro. Una enormidad. Un espectáculo que recoloca a la prueba donostiarra en la órbita de las grandes citas del cross nacional.
Curiosamente, Yuda es un especialista del asfalto, un desconocido en el barro que el pasado mes de marzo se colgó el bronce en el Campeonato del Mundo de medio maratón. A nadie sorprende, sin embargo, que sea africano.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 28 de enero de 2002