El Manchester ha suspendido a su jefe de seguridad, Ned Kelly, antiguo miembro del SAS (cuerpo del ejército británico para misiones clandestinas), mientras investiga su posible implicación en la reventa de entradas. La policía de Manchester ha recibido denuncias según las cuales Kelly habría vendido entradas a un precio superior al fijado.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 29 de enero de 2002