El presidente del Consejo Comarcal de Osona, Enric Castellnou (CiU), se ofreció a pagar los gastos de la manifestación que los ganaderos convocaron el pasado miércoles en Barcelona. El Consejo Comarcal pagó los autobuses que se alquilaron para trasladar a los cerca de 300 ganaderos a la capital catalana. El plan era efectuar una cacerolada ante la Delegación del Gobierno central en Barcelona y entrevistarse con la delegada del Gobierno, Julia García-Valdecasas, para que ésta intercediera ante el Ministerio de Agricultura y le trasladará la necesidad de pedir a Bruselas la aplicación de las medidas de mercado.
Lo que posiblemente no esperaba Castellnou era que los ganaderos, llevados por el ímpetu y de forma totalmente improvisada, decidieran continuar la protesta delante del Palau de la Generalitat. Financiar el viaje para hacer ruido delante de los representantes del PP en Barcelona es una cosa, y él mismo encabezó la comitiva que entró en la Delegación del Gobierno para hablar con García-Valdecasas. Ahora bien, hacer lo propio en casa de uno es otra historia. Eso sí, al presidente del consejo no se le vio en la plaza de Sant Jaume. Castellnou no pudo ser localizado ayer para preguntarle sobre este asunto.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 3 de febrero de 2002