Fue un partido emocionante. Una batalla épica entre dos equipos que se no se resignaban a aceptar un destino marcado. Querían decidirlo ellos mismos. Alemania buscaba con ansiedad el primer triunfo importante desde 1978, cuando ganó su último Mundial en Dinamarca. Suecia pretendía poner un digno colofón a una generación de jugadores que ha llenado su palmarés de medallas de oro y plata.
Y, al final, fueron los escandinavos quienes cuadraron el objetivo. Suecia se impuso en la final de Estocolmo a Alemania por 33-31 después de una prórroga y conquistó su cuarto oro en la quinta edición del Campeonato de Europa de balonmano. Fue una forma de hacer justicia a hombres del calibre de Wislander, Olsson, Anderson y Lindgren, que habían anunciado su adiós al final de esta competición.
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Los veteranos héroes nórdicos, finalistas en el Mundial de Francia 2001, volvieron a jugar con sus automatismos, defendiéndose con una fiereza más propia de la juventud y quemando las opciones de una Alemania que acusó la presión en la prórroga (26-26 fue el resultado final) tras ver anulado en el minuto 60 un gol de saque de centro que pudo darles la victoria.
Final: Suecia, 33; Alemania, 31. 3º y 4º puesto: Dinamarca, 29; Islandia, 22. 5º y 6º: Rusia, 31; Francia, 28. 7º y 8º: España, 36; R. Checa, 29. 9º y 10º: Portugal, 31; Yugoslavia, 25. 11º y 12º: Ucrania, 34; Eslovenia, 29.
Clasificación para el Mundial de Portugal 2003: España-Austria, Israel-Eslovenia, Hungría-Ucrania, Polonia-Suiza, Noruega-Yugoslavia, Macedonia-Islandia, Lituania-Rusia y Croacia-R. Checa (2 y 9 de junio). Suecia, Alemania, Dinamarca y Francia, como campeona vigente, ya están clasificadas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 4 de febrero de 2002