Padres y alumnos del instituto Miguel de Cervantes e integrantes de la asociación de vecinos El Carmen del barrio de La Macarena, en Sevilla, se manifestaron ayer ante las puertas del Parlamento andaluz para protestar por los actos vandálicos que se suceden en el centro desde el inicio del curso y que no han sido atajados aún a pesar de las numerosas denuncias que la dirección del instituto ha presentado ante la Delegación de Educación en Sevilla. Al principio, los ataques, provenientes de un grupo de jóvenes ajenos al centro, se centraban en el mobiliario del instituto, que lleva gastados alrededor de unos 4.200 euros en reparaciones. Sin embargo, a la vuelta de las vacaciones de Navidad, los ataques de este grupo se dirijieron contra algunos alumnos del centro.
Pese a que en un primer momento se destinó una patrulla de polícia de proximidad para ahuyentar a los vándalos, esta medida es considerada del todo insuficiente por los padres y la dirección del centro, quienes ayer entregaron un escrito a la consejera de Educación, Cándida Martínez, para que tome cartas en el asunto. Los padres exigen mayor protección policial a las puertas del centro.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 5 de febrero de 2002