La televisión del Reino Unido, tanto comercial como estatal, está ganando esta temporada la partida al cine. No sólo es preferida mayoritariamente por la audiencia, sino que cuenta cada vez más con el favor de los profesionales. Actores como Kenneth Branagh y directores de la talla de Ken Loach estrenan sus últimos trabajos en la pequeña pantalla antes de lanzarlos en las salas de cine.
"Es lógico", explica Ginger Corbett, profesional de ambos medios, "porque desde hace unos años los productores de televisión se arriesgan más que sus colegas en la industria del cine". Con el cine británico estancado en un par de géneros -policiaco y comedia romántica- de los que surgen éxitos comerciales esporádicos, las televisiones han tomado la delantera en la producción dramática. El docudrama o reconstrucción dramática de un evento real vive su momento estelar como fórmula de calidad que engancha al espectador.
Ello explica que Branagh haya rodado dos teledramas en el último año. En Shackleton, retransmitida por la BBC a principios de enero, interpreta al famoso explorador angloirlandés durante su expedición a la Antártida, entre 1914 y 1916. Regresó el pasado día 25 a la pequeña pantalla en Conspiracy, impactante versión de la reunión de Wannsee (Berlín), donde altos mandos de las SS, Gestapo y Gobierno de Hitler rubricaron la solución final para 11 millones de judíos europeos, la cámara de gas. Estrenada antes en Estados Unidos, ha cosechado una pila de galardones, incluido un Emmy para Branagh y un Globo de Oro para el norteamericano Stanley Tucci por su interpretación de Adolf Eichmann.
El 30 de enero de 1972, el Ejército británico mató a 13 manifestantes en una operación en Derry, Irlanda del Norte, que aún es motivo de polémica. Tres décadas más tarde se acaba de estrenar en televisión antes de pasar a las salas de cine Bloody sunday, con James Nesbitt (presenta el viernes en España Lucky break) en cabeza del reparto. La BBC ha programado Sunday, de Jimmy McGovern, reconocido guionista de cine y televisión, que cuenta con el actor Christopher Eccleston (el esposo en Los otros).
Ken Loach, por su parte, estrenó en televisión La cuadrilla, película de base social y crítica con la privatización de la industria del ferrocarril, a diferencia de España y otros países europeos, donde la distribución arrancó en las salas de cine. "La televisión está despertando", resalta el actor y realizador Peter Mullan (El perdón).
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 6 de febrero de 2002