Quería manifestarle a través de este periódico (gracias) cuánto admiro su valor, coherencia política, humanidad, por ser una persona tan cabal y con coraje dentro del nacionalismo vasco.
Por favor, siga luchando por la libertad de esta tierra tan hermosa, ¡ánimo!
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 7 de febrero de 2002