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Crítica:ROCK

Voluntad de trascender

Nuevo objeto de la fiebre juvenil, el quinteto de Calabassas ofreció en Madrid una excelente actuación frente a una multitud de jóvenes que les reconocían como nuevo faro y cantaban todos los temas del grupo, en especial los de su último y flamante Morning view. Con ese punto solemne y espiritual que poseen tradicionalmente los artistas de rock californianos y que podría calificarse de síndrome Doors, la banda ofreció una variada actuación, en la que quedó prístina su evolución hacia sonidos más elaborados y menos rugientes, dando pie hasta la interpretación en umplugged de alguno de sus temas, cosa que con el mismo grupo y hace unos años hubiera resultado casi impensable.

Otra cara de fenómenos musicales de la actualidad más extravertidos -Slipknot, Limp Bizkit-, Incubus evidencian la identificación de una parte de la juventud con formaciones musicales con voluntad de trascender. La pregunta es: ¿por qué se tomarán tan en serio algo tan históricamente frívolo y divertido como es el viejo rock'n'roll de siempre?

Incubus

Brandon Boyd (voz), Mike Einziger (guitarra), Dirk Lance (bajo), DJ Kilmore (platos) y Jose Pasillas II (batería). Sala La Cubierta. 24,04 euros. Madrid, 9 de febrero.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 11 de febrero de 2002