El Juzgado de Instrucción número 2 de Utrera (Sevilla), que investiga la muerte de la niña de 21 meses que falleció ahogada el pasado 8 de diciembre en la piscina del domicilio familiar, ha decretado el archivo de las actuaciones que se abrieron contra la madre, Soledad Valderas, en las que se le imputaban dos delitos de negligencia en el cuidado de su hija y abandono de menores.
El archivo, según explicó ayer el abogado de Valderas, José Manuel Bejarano, se produce al entender la juez que no hay indicios ni pruebas para sustentar la acusación contra la madre, que pasó más de 24 horas detenida durante la investigación de los hechos.
Soledad Valderas se querelló a finales de enero por detención ilegal y maltrato psicológico contra seis agentes de la Guardia Civil por el tiempo en que estuvo detenida en las dependencias policiales tras la muerte de su hija. El archivo de la causa se produce después de que los análisis del Instituto Nacional de Toxicología indicaran que la menor no había sido objeto de abusos sexuales, como en un principio se sospechó.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 13 de febrero de 2002