El héroe del filme Cocodrilo Dundee, Paul Hogan, ha decidido jubilarse ante la falta de ofertas cinematográficas en Holly-wood y el deseo de educar a su hijo en Australia, anunció ayer la prensa de Sydney. Según el diario Daily Telegraph, el actor ha decidido pasar sus años de jubilado en la ciudad de Sydney con su mujer, Linda Kozlowski, y Chance, el hijo de ambos. El popular artista pone fin así a dos décadas de trabajo en la industria cinematográfica y a los constantes viajes entre Australia, su país de origen, y Estados Unidos. Como parte del plan de retiro, Hogan decidió vender la mansión matrimonial situada en el exclusivo balneario de Byron Bay, a más de 600 kilómetros al norte de Sydney, cotizada en más de tres millones de dólares. Según dijo el portavoz de la agencia inmobiliaria Christie´s Prestige, encargada de la venta de la mansión, la pareja buscará una residencia en otro de los lujosos balnearios de Sydney con vistas a la bahía de la ciudad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 15 de febrero de 2002