Los 16 fascículos que componen Monstruos, S.A., un coleccionable de miedo, explican todos los secretos de la película y sus personajes. El primero, que se distribuirá manaña, muestra cómo es la ciudad de Monstruópolis, explica cómo son los habitantes de esta gran urbe -tiene unos 6,5 millones de ciudadanos de un solo ojo, varias cabezas o múltiples brazos- y cómo se desarrolla la vida en ella. Los habitantes de Monstruópolis, por ejemplo, adoran la vida nocturna y, aunque prefieren el coche al transporte público, la crisis energética que vive la ciudad ha hecho que la administración haya puesto en marcha una campaña bajo el eslogan: 'No malgastes gritos: da un paseo'. El fascículo número 2, que se entregará el 23 de febrero, habla de Monstruos, S. A., la gran empresa miedoenergética, y su planta de sustos, su trituradora y su CDA: Comisión de Descontaminación Antiniños.
Los diez fascículos siguientes muestran a los personajes principales de la historia y sus peculiaridades, desde los protagonistas Sulley (2 de marzo), Mike (9 de marzo) y Boo (16 de marzo), pasando por la bella secretaria Celia Mae, cuyo principal encanto son sus cabellos de serpientes (23 de marzo), el gran jefe Waternoose (30 de marzo) o el aterrador Randall (6 de abril). También se describe a los asustadores y su trabajo (20 de abril), a sus ayudantes (27 de abril) y la maquinaria y características de la CDA (4 de mayo), una especie de fuerza de asalto monstruosa.
El fascículo número 13 (11 de mayo) muestra las puertas por las que se accede al mundo real, su sofisticada tecnología y los mecanismos que la ponen en marcha. El siguiente número (18 de mayo) habla de la amistad entre los dos protagonistas, Sulley y Mike, y explica cómo evoluciona su relación en la película, incluidas sus crisis. El fascículo número 15 (25 de mayo) explica la especial relación entre la niña Boo y el monstruo Sulley. El último fascículo muestra los bocetos de la película, las imágenes y el material gráfico utilizado en Monstruos, S. A.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 16 de febrero de 2002