Dos israelíes resultaron muertos y otros treinta heridos a última hora de la tarde de ayer como consecuencia de un atentado suicida perpetrado por un militante del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) en el centro comercial de un asentamiento judío de Cisjordania. El atentado tuvo lugar a la misma hora en que millares de personas se manifestaban por las calles de Tel Aviv pidiendo el fin de la ocupación de los territorios palestinos y coincidió con el regreso a Oriente Próximo del director de la CIA, George Tenet, en busca de una salida al conflicto.
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Media hora después de que finalizara la fiesta religiosa del sabath, un palestino militante del partido laico FPLP se suicidaba en el centro comercial del asentamiento de Karnei Chomron, al norte de Cisjordania, haciendo estallar una carga explosiva que llevaba adherida al cuerpo.
Los últimos minutos de la vida del suicida, Sadek Abdel Hafid, vecino de la ciudad próxima de Kalkilia, quedaron grabados por las cámaras de vigilancia del centro comercial, que a aquella hora empezaba a llenarse de adolescentes. La explosión del artefacto causó la muerte de una mujer y de un muchacho, y heridas a otras treinta personas, cinco de las cuales se encontraban anoche en estado grave.
Minutos más tarde, un comunicante anónimo llamaba a un corresponsal extranjero en Nablús para reivindicar el atentado en nombre del FPLP, asegurando que se trataba de una "respuesta a las incursiones y a los bombardeos" efectuados por los israelíes contra los palestinos y en venganza por la muerte de un dirigente de Hamas, Nasij Abu Sabara, que fue asesinado a mediodía por una bomba de los servicios especiales israelíes. A pesar de esta reivindicación, las autoridades de Israel culparon una vez mas del atentado al presidente Yasir Arafat.
El atentado se produjo a la misma hora que por las calles del centro de Tel Aiv discurría la mayor manifestación pacifista de los últimos años, en la que se pedía a gritos el fin de la ocupación y el retorno inmediato a la mesa de negociaciones. La manifestación, convocada por el partido de la oposición Meretz y la plataforma pacifista Paz Ahora, suponía la reactivación del movimiento pacisfista en Israel, que desde hace casi una década se encontraba prácticamente fuera de juego. Más de 50.000 personas participaron en la marcha.
El atentado suicida y la ofensiva pacifista coincidieron con el regreso a Oriente Próximo del director de la CIA, George Tenet, que se entrevistó en Sharm el Cheik (Egipto) con el presidente Hosni Mubarak. Con el regreso de Tenet a la zona, la CIA reanuda su papel activo en la mediación del conflicto israelo-palestino, que le fue otorgado en 1998 en los Acuerdos de Wye.
Además del atentado de Karnei Chimron, en las últimas horas cinco palestinos y un israelí murieron en diversos incidentes armados en Cisjordania y Gaza.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 17 de febrero de 2002