Unas 200 personas han muerto asesinadas por motivos étnicos desde el pasado viernes en el noreste de la República Democrática de Congo, según informaron ayer fuentes del Ejército ugandés. Los enfrentamientos se produjeron entre miembros de las etnias hema y lendu. Según los primeros, los lendu atacaron un poblado situado a unos 25 kilómetros de la ciudad congoleña de Bunia y mataron a 200 personas. 'Es lo mismo que ha venido ocurriendo durante los últimos tres años', declaró Jean-Baptiste Dhetchuvi, portavoz de la comunidad hema. Muchas de las víctimas fueron asesinadas a cuchilladas y machezatos en un viejo conflicto por la utilización de los recursos naturales, que, según los observadores, en los últimos años podría haber costado la vida a miles de personas.
Esta lucha étnica es un nuevo factor de desestabilización a la guerra de Congo, que comenzó en 1998, cuando rebeldes apoyados por Ruanda y Uganda trataron de derribar al entonces presidente, Laurent Kabila.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 17 de febrero de 2002