Un estudio realizado por Carles Monereo, profesor de Psicología de la Educación en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), pone de manifiesto que el 80% de los estudiantes de Magisterio estudian a 'piñon fijo' y que no emplean las estrategias de un modo reflexivo 'para ser un aprendiz permanente'. 'Es especialmente sangrante si tienes en cuenta que estos alumnos son los que en el futuro van a impartir clases y que, por tanto, deberían dominar las estrategias de aprendizaje. Imagínate si las pruebas las hubieramos pasado en las ingenierías', asegura.
Esto lo descubrió analizando la manera en que estos universitarios (unos 200 de la UAB y de la Universidad de Gerona) tomaba apuntes. 'Es una forma exaustiva y absolutamente literal, como meros copistas', dice el investigador. Y puntualiza: 'Esto no es culpa de los propios estudiantes. Es un reflejo del tipo de educación que han recibido, en la que se valoran más los contenidos que la adquisición de herramientas para estudiar. Es lógico que si a un alumno se le está pidiendo en clase que vomite lo que ha recibido se está fomentando este tipo de aprendizaje'.
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Químicos o docentes
La preocupación que muestra Monereo es bastante general. 'Hay una falta de formación bastante generalizada entre los profesores para que sean capaces de enseñar a sus alumnos a aprender. Sobre todo en los docentes de secundaria y bachillerato, donde les han enseñado a ser químicos, o físicos, pero donde carecen de una buena metodología pedagógica con los chavales', asegura Rosa Cristóbal, profesora de didáctica general en la Escuela de Magisterio Escuni. Cristóbal, en los cursos que imparte a los docentes dentro de los institutos, se ha dado cuenta de estas carencias y de la dificultad que entraña para los profesores coordinarse y ponerse de acuerdo sobre las habilidades que, cada uno en su asignatura, va a trabajar dentro del aula.
'Hay que cambiar la perspectiva en la enseñanza. Dar más peso a los procedimientos de aprendizaje y no tanto a los contenidos. Pero siempre dentro de las propias áreas y no al margen de las asignaturas', señala Elena Martín, profesora de psicología en la Autónoma de Madrid, quien mantiene que aún así existen centros escolares que trabajan las estrategias y que, además, las evalúan como una parte importante de la nota del alumno.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 25 de febrero de 2002