Los italianos han demostrado un apego inesperado a la frágil lira, protagonista de mil y una devaluaciones. El Banco de Italia ha recuperado ya la práctica totalidad de los 125 billones de liras que había en circulación, pero los especialistas dan por descontado que unos 10 billones de liras (unos 5.180 millones de euros) no regresarán jamás a las arcas del Tesoro, porque sus propietarios habrán decidido guardarlas como recuerdo, o porque hayan sido destruidas o se hayan perdido.
En el caso de las monedas, los datos son aún más abultados: de los 15.000 millones de piezas acuñados desde el final de la II Guerra Mundial a hoy, sólo ha regresado al Tesoro Público un 20%.
Los italianos despiden hoy a la lira, su moneda nacional de los últimos 140 años (los años de Italia como nación), con una pequeña fiesta simbólica. A los acordes del himno nacional, Alberto Sordi, y la exuberante Valeria Marini, lanzarán una moneda de 500 liras a la Fontana de Trevi, la fuente más famosa de Roma.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 28 de febrero de 2002